Para que el hombre aprenda a humillarse, Juan nació el día a partir del cual los días comienzan a disminuir.
Para mostrarnos que Dios debe ser exaltado, Jesucristo nació el día en que los días comienzan a crecer.
San Agustín
En cada uno de los cuatro lados de la cruz: C. S. P. B. Crux Sancti Patris Benedicti (Cruz del Santo Padre Benito)
En el palo vertical de la cruz: C. S. S. M. L. Crux Sácra Sit Mihi Lux (Que la Santa Cruz sea mi luz)
En el palo horizontal de la cruz: N. D. S. M. D. Non Dráco Sit Mihi Dux (Que el demonio no sea mi guía)
Empezando por la parte superior, en el sentido del reloj: V. R. S. Vade Retro Satána (Aléjate Satanás) - N. S. M. V. Non Suáde Mihi Vána (No me aconsejes cosas vanas) - S. M. Q. L. Sunt Mála Quae Libas (Es malo lo que me ofreces) - I. V. B. Ipse Venéna Bíbas (Bebe tú mismo tu veneno)
Sobre la cruz suele aparecer unas veces la palabra Pax y otras -en las más antiguas- la palabra Iesus.
En las antiguas medallas aparece, rodeando la figura del santo, este texto latino: Eius in óbitu nostro preséntia muniámur (Que a la hora de nuestra muerte, nos proteja tu presencia). En las medallas actuales, frecuentemente es sustituida por : Crux Sancti Patris Benedicti, o por la inscripción: Sanctus Benedictus.
"Son olas gigantescas que te llegan en la vida provocando golpes, heridas, confusión e incluso asfixia, provocadas por fracasos, accidentes, enfermedades o pérdidas que se propagan por todo tu ser, inundando cuerpo y alma, y ofreciéndote la increíble posibilidad de sentir profundamente lo que de verdad importa"