La Medalla de la Inmaculada Concepción -popularmente conocida como la Medalla Milagrosa- fue diseñada según las indicaciones que la Santísima Virgen dio a Santa Catalina Labouré (1806-1876) durante una aparición que tuvo lugar el día 27 de noviembre de 1830.
Detalles del anverso de la Medalla:
María está de pie sobre un globo como la Reina del cielo y de la tierra. Sus pies aplastan la serpiente para proclamar que Satanás y todos sus partidarios no tiene poder frente a ella.
El año 1830 que aparece en la Medalla Milagrosa es el año en que la Santísima Virgen dio el diseño de la Medalla a santa Catalina Labouré.
La referencia a María concebida sin pecado manifiesta el dogma de la Inmaculada Concepción de María que fue proclamado 24 años más tarde, en 1854.
Detalles del reverso de la Medalla:
Doce estrellas rodean una “M” grande de la que surge una cruz. Las doce estrellas se refieren a los Apóstoles, que representan la Iglesia entera en torno a María. También nos recuerdan la visión del Apocalipsis (12:1): “un gran signo apareció en el cielo, una mujer vestida con el sol, y la luna bajo sus pies y en su cabeza una corona de doce estrellas”.
La cruz simboliza a Cristo y nuestra redención. La “M” representa a María, y su inicial entrelazada con la cruz demuestra la estrecha participación de María con Jesús y en nuestro mundo. Los dos corazones, uno rodeado de espinas y el otro atravesado por una espada representan el amor de Jesús y de María para nosotros.
Vida de Santa Catalina Labouré y devoción a la Medalla Milagrosa
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